El primer regalo material que recibí de él fue un lápiz.
El segundo es un libro. Y no cualquier libro.
Y todos los otros regalos, los que no tienen precio...
Las chispas que no pueden verse, aunque él me discuta que sí...
Esto nace y muere cada día, se supone que no tiene futuro pero tiene cada vez más pasado.
Tengo la sensación de que uno de estos días mi azul interior va a salir hasta mi piel. Y me voy a reducir hasta el tamaño de un Pitufo.
1 comentario:
Y no será que vos dejas que muera?
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