como un equilibrista caminando sobre hilo dental. A ambos lados, tentacion. A la izquierda, lo conocido, lo sabidamente infructífero. A la derecha, lo nuevo, lo más vacío. Sólo en el medio el aprendizaje, la superación. Es fácil ladearse a la izquierda, el peso de la historia y la familiaridad tiran. Es fácil caerse hacia la derecha, el potencial y las promesas atraen. Es inevitable que al inclinarse hacia un lado el impulso sea un esfuerzo por volcarse al lado opuesto. El resultado es el mismo del otro lado. Esto se repite infinidad de veces, cada vez con menos intensidad. Una suceción de oscilaciones cada vez más débiles. Un zizagueo agonizante, hasta llegar a la quietud, hacia el centro, hacia el equilibrio. Ya estuve de los dos lados. En este momento estoy rebotando desde la izquierda. La derecha es mi próxima visita. Ojala que encuentre resistencia, espero volver de ahí.
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All the rooms renumbered
There is no time to analize
to think things through
to make sense
Puedo perderme en la ciudad. Perdido en el azar, no hay tiempo para analizar, para pensar las cosas. Estoy en modo random, tomo decisiones aleatoriamente. No tengo más capacidad de análisis. Estoy desbordado de datos, de posibilidades, infinitas combinaciones. Es una pérdida de tiempo y de energía ser racional. Cada decisión con desapego, ya no importan las consecuencias. Como tirar una moneda. Sí, es peligroso. Soy un peligro caminando. Una caja de sorpresas para mi mismo. Pero me tomo vacaciones. No puedo seguir siendo el tipo racional, el tipo con conducta. Deliberadamente a la deriva, es por primera vez agradable dejarse llevar. Es relajante despreocuparse de las consecuencias y entregarse por completo.
~Que sea lo que Dios quiera~
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